SALÓN DE ACTOS ANTIGUA ERMITA DE SAN ANDRÉS
VALDUNQUILLO (VALLADOLID)
SÁBADO 23 DE SEPTIEMBRE CINCO DE LA TARDE
GRUPO DE TEATRO MADRES Y PADRES COLEGIO DEL CARMEN
GRUPO DE BAILE EL CAPRICHO
El horario era poco habitual debido al programa de fiestas del pueblo, pero estuvo muy bien compensado por el marco arquitectónico -ermita mudéjar rehabilitada y reutilizada como sala de teatro o auditorio-. Recuerda un poco a los antiguos corrales de comedias pero con cubierta.
El texto de La zapatera prodigiosa es definido por su autor como farsa violenta en dos actos. La zapatera prodigiosa se estrenó el 24 de diciembre de 1930, el mismo Lorca aparecía al principio en el personaje del Autor, Margarita Xirgú actuó de protagonista. García Lorca incorpora
canciones populares, recopiladas y musicadas
por él mismo, como "Anda jaleo".
Para el estreno de la obra en Buenos Aires, añadió un final de
fiesta con otros romances recogidos y musicados por él, como Los peregrinitos o la Canción de los cuatro muleros.
Federico quiso expresar la lucha de la realidad con
la fantasía, con todo aquello que es irrealizable y que existe en el
fondo de toda criatura. Un matrimonio de conveniencia y sin verdadero
amor y la lucha de una mujer entre la realidad y el deseo son los cauces
por los que transcurre la obra. Al principio cuando el autor se retira, da paso a esa Zapatera que grita desde fuera del
escenario: "¡Quiero salir!"
En el segundo acto aparece una escena en la que el Zapatero cuenta una
historia a través de un cartelón con pequeños cuadros pintados. Los retablos narraban de forma visual historias, eran la herramienta de los titiriteros que iban de pueblo en pueblo.
Gracias al ritmo de la obra junto al buen hacer de actores y actrices el tiempo pasó volando. La representación tanto del grupo de teatro como de las bailarinas estuvo muy acertada. Se refleja el formidable trabajo en los ensayos dirigidos por Floren Rabanillo.
Los habituales seguidores de los espectáculos de este grupo esperamos la representación del próximo año. Seguro que nos sorprenderá positivamente.
domingo, 24 de septiembre de 2017
miércoles, 20 de septiembre de 2017
CAZORLA
El viernes 15 de septiembre amaneció más fresquito. Por una carretera autonómica, bien asfaltada en general pero con dos kilómetros "intransitables" al bordear Torreperogil, llegamos en tres cuartos de hora a Cazorla desde Úbeda.
Aparcamos a la entrada del pueblo, en la carretera buscando sombra. Subimos la "cuestecita" hasta la Plaza de Santa María.
https://www.youtube.com/watch?v=LyorblQoC5c
Entramos en la oficina de turismo para concertar visita guiada a la bóveda del río. Hasta las once paseamos por los restos de la iglesia, sacamos fotos desde la torre.
La oficiante de turismo nos guió por la bóveda del río, sobre la que se construyó la plaza y la iglesia de Santa María. La solución, como no, se debe a Vandelvira, arquitecto renacentista omnipresente por toda la provincia de Jaén.
https://www.youtube.com/watch?v=cfFTifWD3VE
En la plaza junto a la fuente renacentista nos sentamos a comer.
Yo probé el rin-ran típico de esta zona y disfruté de una excelente trucha al horno.
Desde el camino al castillo hay vistas espectaculares del casco viejo de Cazorla.
Aparcamos a la entrada del pueblo, en la carretera buscando sombra. Subimos la "cuestecita" hasta la Plaza de Santa María.
https://www.youtube.com/watch?v=LyorblQoC5c
Entramos en la oficina de turismo para concertar visita guiada a la bóveda del río. Hasta las once paseamos por los restos de la iglesia, sacamos fotos desde la torre.
La oficiante de turismo nos guió por la bóveda del río, sobre la que se construyó la plaza y la iglesia de Santa María. La solución, como no, se debe a Vandelvira, arquitecto renacentista omnipresente por toda la provincia de Jaén.
https://www.youtube.com/watch?v=cfFTifWD3VE
Después de visitar el molino y un museo sobre las especies animales y vegetales de la sierra de Cazorla subimos hacia el castillo. El paseíto resultó agradable por que había sombra y gracias a la suave temperatura.
La entrada era gratuita. En una de sus torres había un museo etnográfico. El guía era un cincuentón pasota que no se molestó lo más mínimo. Recorrimos todas las plantas de la torre del homenaje empezando por las bajas -musulmanas- hasta las dos últimas de la época cristiana.
https://www.youtube.com/watch?v=kJrO0dkcGpw
https://www.youtube.com/watch?v=kJrO0dkcGpw
En la plaza junto a la fuente renacentista nos sentamos a comer.
Yo probé el rin-ran típico de esta zona y disfruté de una excelente trucha al horno.
Desde el camino al castillo hay vistas espectaculares del casco viejo de Cazorla.
GRANADA
A las ocho salíamos de Úbeda. Tras hora y media de viaje por la autovía del Olivar y desde Jaén por la A-44 llegamos a la gasolinera. Víctor subió al coche y nos guió hasta la Abadía del Sacromonte. Camino difícil si no se conoce o si no te engaña el GPS. Este complejo, el Escorial granadino, se compone de las Santas Cuevas, la Abadía del siglo XVII-XVIII, el Colegio del siglo XVII y el Seminario. Aquí se fundó uno de los primeros colegios universitarios privados de Europa, en 1610.
Los lunes es gratis la entrada a las diez de la mañana con reserva previa. La guía se dispersaba en ocasiones con chascarrillos y anécdotas familiares. En el museo merece la pena finar la atención en los códices e incunables - los libros plúmbeos, mapa de Tolomeo, generalidades de la Meciian de Averroes,...- y en algunas pinturas (retrato de Francisco de Saavedra por Goya, y la Virgen de la Rosa del flamenco Gerard David). Lo más destacable de la visita es el circuito por las Santas Cuevas. Las capillas excavadas en el supuesto lugar del martirio nos acercan a las creencias de la España profunda.
Más información sobre la abadía en
https://www.youtube.com/watch?v=8f84I54MpPI
http://www.granadadirect.com/monumentos/abadia-del-sacromonte/
Tras la visita bajamos andando por el barrio de Sacromonte hasta el Albaicín.
Por el camino pudimos contemplar excelentes vistas a la izquierda dejando a la derecha las cuevas del Sacromonte. https://www.youtube.com/watch?v=ipg89nOLsdc
Entramos en el Carmen de la Universidad. Nos paseamos por el barrio hasta el mirador.
Bajamos al centro. Estuvimos fisgando en las callejuelas del "zoco". Nos tomamos unas cervezas, tenía el estómago vacío porque no había tomado mi café de las doce. Muy bueno el botellín de alhambra y excelentes las tapas.
Cuando llegó Angeles fuimos a comer.
De postre visitamos la capilla de los Reyes Católicos. La audioguía se enrollaba bastante pero daba bien las explicaciones.
https://www.capillarealgranada.com/
Recorrimos el Paseo de los Tristes junto al Darro, pasando primero por delante de la Chancillería.
https://www.youtube.com/watch?v=IsRouObRZkE
http://www.granadatur.com/monumento/185-carrera-del-darro/
Tomamos café con hielo en una terraza con vistas a la Alhambra. Nos sorprendió el tamaño liliputiense de los cubitos.
Tomamos el microbus de vuelta a la Abadía, donde estaba aparcado el coche. Volvimos a atravesar el Sacromonte, esta vez subiendo. El trayecto estuvo amenizado por unos jovencitos paisanos que sufrían efectos de las cervezas o de humos marianos. Como iba de pie insistían en cederme el asiento ...
Después de acercar a Víctor a La Zubia volvimos a Úbeda. La circulación era demasiado densa a la salida de Granada, parecía la M-40 en hora punta. El resto del trayecto fue muy tranquilo.
Al llegar aparcamos en la plazita de las Descalzas junto al apartamento, había un hueco libre, que suerte.
lunes, 4 de septiembre de 2017
LOS LIBROS PLÚMBEOS O PLOMOS DEL SACROMONTE
Escritos en árabe y con alfabeto salomónico, los Libros plúmbeos tienen
una curiosa historia: cuando en 1588 se derribó el alminar de la
mezquita mayor de Granada -"la torre vieja"- para construir sobre ella la tercera nave catedral,
apareció un cofre con un pergamino, un trozo de un manto de la Virgen y
los huesos de un protomártir, san Esteban. "Casualmente" el descubrimiento se realizó el día de San Gabriel, 18 de marzo, "el arcángel" más importante para el Islam. Se abrió al día siguiente, San José, 19 de marzo de 1588.
El pergamino, fechado en el siglo I, pero escrito en castellano del siglo XVI, anunciaba la inminente aparición de unos libros que, por su carácter, serían una revelación religiosa.Esos libros aparecieron siete años después en Valparaíso (nombre originario del Sacromonte granadino), junto a las reliquias y restos de supuestos santos y mártires, como san Cecilio, actual patrón de Granada. Los 21 libros, que son planchas de plomo circulares de unos diez centímetros de diámetro, tallados con buril, eran tratados religiosos, presuntamente del siglo I, que hacían de los conceptos del islam y el cristianismo una religión sincrética.
Enviados a Roma para su análisis, el papa Inocencio XI los condenó por sus "ideas mahometanas, puras ficciones humanas fabricadas para ruina de la fe católica". No sucedió lo mismo con las reliquias ni los huesos, que están considerados sagrados por la Iglesia y custodiados en Granada y en El Escorial, en donde, por ejemplo, se encuentra el trozo de manto de la Virgen, que al parecer curó un episodio de gota de Felipe II.
El 17 de junio del año 2000 el Vaticano decidió devolver los Libros plúmbeos a Granada. Fue el propio cardenal Ratzinger el encargado del protocolo. El arzobispo de Granada, Antonio Cañizares, resaltó entonces "la generosidad del Vaticano, ya que no tenía ninguna obligación de devolverlos".
Los falsificadores convirtieron en autores de los libros a San Cecilio y San Tesifón, dos varones apostólicos de los que no se sabía nada y que, además, eran árabes, en un intento de despertar la simpatía hacia los moriscos. De ese modo, Granada se convirtió en una ciudad con un santo inventado y con varios falsos mártires.
El plan de los moriscos nobles tuvo un éxito relativo. En 1682, la Iglesia de Roma, tras casi un siglo de estudios y análisis, calificó a los Plúmbeos de herejía, reforzando las facciones más radicales de la Iglesia contrarreformista. Los moriscos fueron obligados a abandonar España entre 1609 y 1614. Sin embargo, los linajes moros aristocráticos de Granada nunca llegaron a ser expulsados.
MÁS INFORMACIÓN EN
http://www.madrimasd.org/cienciaysociedad/entrevistas/quien-es-quien/detalleGrupo.asp?id=23
VÍDEOS
https://www.youtube.com/watch?v=9RZlOSWlTzg
https://www.youtube.com/watch?v=1hGDpYnoNUk
https://www.youtube.com/watch?v=8f84I54MpPI
DOCUMENTAL EL ENIGMA DE LOS LIBROS PLÚMBEOS
https://www.youtube.com/watch?v=XBN4czIwSqI
Actualmente se encuentran en la biblioteca de la Abadía del Sacromonte, construida precisamente en el lugar de su hallazgo.
Los granadinos siguen celebrándolo comiendo habas frescas, tortilla del Sacromonte y "salaíllas" en la Romería de San Cecilio, el primer domingo de febrero. También bailan "la reja". Esta fiesta cumple el voto que hizo el ayuntamiento de Granada, en 1599, con motivo de la peste que diezmó a la población en ese año.
Antiguamente, durante la romería, las jovencitas tocaban la piedra blanca para encontrar marido.
Según los Libros Plúmbeos San Cecilio fue enviado a la península -junto a Isio y Tesifón- por San Pedro. Fueron martirizados el uno de febrero por los romanos en las catacumbas de Sacromonte.
El pergamino, fechado en el siglo I, pero escrito en castellano del siglo XVI, anunciaba la inminente aparición de unos libros que, por su carácter, serían una revelación religiosa.Esos libros aparecieron siete años después en Valparaíso (nombre originario del Sacromonte granadino), junto a las reliquias y restos de supuestos santos y mártires, como san Cecilio, actual patrón de Granada. Los 21 libros, que son planchas de plomo circulares de unos diez centímetros de diámetro, tallados con buril, eran tratados religiosos, presuntamente del siglo I, que hacían de los conceptos del islam y el cristianismo una religión sincrética.
Enviados a Roma para su análisis, el papa Inocencio XI los condenó por sus "ideas mahometanas, puras ficciones humanas fabricadas para ruina de la fe católica". No sucedió lo mismo con las reliquias ni los huesos, que están considerados sagrados por la Iglesia y custodiados en Granada y en El Escorial, en donde, por ejemplo, se encuentra el trozo de manto de la Virgen, que al parecer curó un episodio de gota de Felipe II.
El 17 de junio del año 2000 el Vaticano decidió devolver los Libros plúmbeos a Granada. Fue el propio cardenal Ratzinger el encargado del protocolo. El arzobispo de Granada, Antonio Cañizares, resaltó entonces "la generosidad del Vaticano, ya que no tenía ninguna obligación de devolverlos".
Los falsificadores convirtieron en autores de los libros a San Cecilio y San Tesifón, dos varones apostólicos de los que no se sabía nada y que, además, eran árabes, en un intento de despertar la simpatía hacia los moriscos. De ese modo, Granada se convirtió en una ciudad con un santo inventado y con varios falsos mártires.
El plan de los moriscos nobles tuvo un éxito relativo. En 1682, la Iglesia de Roma, tras casi un siglo de estudios y análisis, calificó a los Plúmbeos de herejía, reforzando las facciones más radicales de la Iglesia contrarreformista. Los moriscos fueron obligados a abandonar España entre 1609 y 1614. Sin embargo, los linajes moros aristocráticos de Granada nunca llegaron a ser expulsados.
MÁS INFORMACIÓN EN
http://www.madrimasd.org/cienciaysociedad/entrevistas/quien-es-quien/detalleGrupo.asp?id=23
VÍDEOS
https://www.youtube.com/watch?v=9RZlOSWlTzg
https://www.youtube.com/watch?v=1hGDpYnoNUk
https://www.youtube.com/watch?v=8f84I54MpPI
DOCUMENTAL EL ENIGMA DE LOS LIBROS PLÚMBEOS
https://www.youtube.com/watch?v=XBN4czIwSqI
Actualmente se encuentran en la biblioteca de la Abadía del Sacromonte, construida precisamente en el lugar de su hallazgo.
Los granadinos siguen celebrándolo comiendo habas frescas, tortilla del Sacromonte y "salaíllas" en la Romería de San Cecilio, el primer domingo de febrero. También bailan "la reja". Esta fiesta cumple el voto que hizo el ayuntamiento de Granada, en 1599, con motivo de la peste que diezmó a la población en ese año.
Antiguamente, durante la romería, las jovencitas tocaban la piedra blanca para encontrar marido.
Según los Libros Plúmbeos San Cecilio fue enviado a la península -junto a Isio y Tesifón- por San Pedro. Fueron martirizados el uno de febrero por los romanos en las catacumbas de Sacromonte.
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