domingo, 27 de diciembre de 2020

HISTORIA DEL CINE EN VALLADOLID

Cuando paseas por el Paseo del Hospital Militar y llegas a los Brodway te encuentras en la acera un recordatorio del centenario del cine en Valladolid. (1896-1996).  

El 18 de septiembre de 1896, «El Norte de Castilla» informaba, en la misma columna y antes del epígrafe «Festejos para hoy» —junto a los espectáculos dramáticos ofrecidos en los Teatros Calderón, Lope de Vega y Zorrilla—, de la llegada de «la más moderna maravilla de este siglo: una colección científico-recreativa que consta de kinetógrafo, fonógrafo y grandiosos panoramas». El diario vallisoletano se refería con ello al Eliseo Express, una atracción anunciada mediante el texto titulado «Una broma pesada». Dura ante esas fiestas también se anunció en el «El Norte de Castilla»  el microfonógrafo de Edison y otros dos espectáculos de fotografía animada: Los «cinematógrafos» de la calle de la Constitución y de Fuente Dorada. El 10 de diciembre de 1896 se anunciaba la presencia del «cinematógrafo Charles Kalb» en el Teatro Zorrilla.


En Valladolid se empezó proyectando películas de forma estable a principios del XX en los teatros como el Lope de Vega (1861), el Calderón de la Barca (1864),  el Zorrilla (1884), el Cervantes (1896),  el de la Comedia o Gran Teatro (1920, después cinema Coca-cerrado en 2003-), el salón Pradera (1908-) y Teatro- cine Hispania (1915).  



El 19 de abril de 1908  abrió sus puertas en la capital vallisoletana el «Cinematógrafo Novelty», regido por los empresarios Torrebadelía, Ibáñez y Novella. Era un local integrado ya en la nueva oleada de salas de exhibición cinematográfica que se construyeron en España inspiradas en la arquitectura modernista. El programa de la inauguración del «Cinematógrafo Novelty» estuvo compuesto por los títulos «Ladrones incendiarios», «El beso de la bruja», «Caja misteriosa» y «Carrera de borrachos» y por el debut del célebre artista Liane and Grek’s, «el hombre rana»




La primera instalación del cine sonoro, con equipo Wester Electric- se realizó en el Teatro Zorrilla en 1930. La primera sesión se proyectó el 16 de octubre. Todos las demás  se van sumando poco a poco. En marzo de 1932 solo quedaban tres salas en cine mudo: Teatro Calderón, Cinema Hispania y Gran Teatro. 





El censo de salas de cine suma cuarenta y un establecimientos , desaparecidos en su mayor parte por la piqueta en el tercer cuarto del siglo XX.  En los años 70 prácticamente cada barrio disponía de un cine:  Capitol (1931), Lafuente (1933), Roxy (1935), Goya (1944), Delicias (1956),  La Rubia (1956), Avenida (1957), Cervantes (1959), Alameda (1961), Rex (1962), La Rubia (1962), Embajadores (1967), Castilla (1955, 1975), Matallana (1968), Babón (1968)  y Vistarama (1974). 








En febrero de 1950 se presentó al pueblo vallisoletano la propuesta “Un Cine-Club para Valladolid”, primer cineclub en la ciudad con una vocación pedagógica opuesta al cine comercial. Proyectaba en el sala del Frente de Juventudes, calle Muro. Se cerró en 1951 pero fue el precursor de la eclosión a finales de los setenta: cine club La Salle, sesiones de arte y ensayo en el Zorrilla, sala Borja, ... Hicieron frente a la censura cinematográfica proyectando muchas películas del cine internacional. Significaba la libre circulación de ideas y la apertura cultural hacia Europa.  Otro adelantado a su tiempo fue el Kotskas-Luises (1941). 

La SEMINCI ha ido evolucionando desde su nacimiento como Semana de Cine Religioso de Valladolid, en marzo de 1956 vinculado a la Semana Santa. 


El primer gran cambio fue, su conversión, cuatro años después, en Semana Internacional de Cine Religioso y de Valores Humanos. Se introdujo como gran novedad la admisión de filmes en cuyo contenido predominaran los valores humanos y comprometidos. El segundo se dio en 1973, cuando pasó a llamarse, definitivamente, Semana Internacional de Cine de Valladolid. 


En 1962 se creó la Cátedra de Historia y Estética de la Cinematografía en la Universidad de Valladolid. Fue la primera cátedra de su género creada en España y la segunda en Europa. La primera europea fue la de Historia y Teoría del Cine en la Universidad de Pisa en 1959. El verano de 2019 se impartió el 56º Curso de Cinematografía en la UVA. 



Hacia 1980 el séptimo arte protagonizaba, por no decir monopolizaba, los planes de ocio de los vallisoletanos. El final de esos  años dorados estuvo marcado por la aparición de los locales con varias salas: el Manhattan con tres  (1983), Brodway con once (1996) y Casablanca con tres. Para minorías abrieron el mini cine Groucho (50 butacas) en 1983 y  Casablanca  II (2011--2020).  Pero  las grandes superficies comerciales se llevaron los cines al extrarradio en los 90 : Parquesol (1996), Megarama  Vallsur (1998, 11 salas) , Ábaco (8 salas, Pryca, 1998). Ya en el siglo XXI se inauguraron  Cinesa Zaratán (18 salas)  y Ocine Rio Shopping (10 salas). 



En junio de 2018 se realizó una marcha en bici "Las bicicletas son para recordar los cines de barrio" organizada por la Asamblea ciclista. Estuvo guiada por Jesús Anta y Alfonso Población. Partió de Fuente Dorada y recorrió la ciudad con paradas en los cines desaparecidos (Capitol, Goya,  Matallana, Delicias, Babón, Alameda. Vistarama, Groucho,...).


Valladolid de cine y teatro’, editado por el Ayuntamiento en el año 2017, es una historia en imágenes que comienza en el siglo XVI con la inauguración del primer Corral de Comedias en la plaza de la Cruz Verde y concluye en 2005 con la apertura de las ocho salas de los cines Ábaco en el Barrio España. Miguel Ángel Soria la cuenta con la recreación de los edificios en dibujos, planos y una extraordinaria colección de programas y carteles que acompañan los textos.
 
En este enlace puedes ver un plano de Valladolid con los cines.

No hay comentarios:

Publicar un comentario