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Editorial Destino 2022.
La propia Dolores Redondo se autodefine como una escritora de tormentas. En esta novela cambia los paisajes de la trilogía del Baztán por los de los lagos de Escocia y Pamplona por Bilbao. El tándem de asesino en serie y policía adquiere un curioso paralelismo. Pero además el protagonista va formando dúos con el ertzaina, un chaval discapacitado, la cantinera y la psiquiatra. Toda una red de relaciones personales muy bien tejida. La crecida del Bidasoa en Elizondo se transforma en este caso en la inundación del Nervión en la semana grande (1983) de Bilbao.
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La fuerza de su narración y el estudiado perfil de los personajes se mantiene en Esperando al diluvio. El Arenal, las siete calles del casco viejo, la ribera derecha hasta Deusto, la antigua ribera izquierda con sus muelles y almacenes, la subida a Begoña,... El Bilbao industrial tan gris de los años ochenta, antes de la limpieza de la Ría, sirve de telón de fondo reconocible y familiar. Nada se parecía a la ciudad turística de hoy.
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Esta autora se ha convertido en mi escritora favorita de thrillers, no decepciona en esta nueva obra.. La intriga se adereza con elementos esotéricos como las experiencias cercanas a la muerte y con experiencias vitales como una enfermedad terminal.
En la Web oficial de la autora
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