martes, 8 de septiembre de 2020

VILLAFRANCA DEL BIERZO

 El camino de Santiago entra en Villafranca por el cementerio y la Iglesia de Santiago.


Se trata de la iglesia románica mejor conservada del Bierzo.



En el interior no se permite hacer fotos. Sobresale la portada del Perdón. Es uno de los iconos del Camino de Santiago francés.  Sólo se abre cada Año Santo. Tiene cuatro arquivoltas levemente apuntadas. Una, decorada con hojas de acanto y animales; dos, con boceles y medias cañas y la cuarta, con personajes, algunos con aureola de apóstoles. En la parte superior, la talla grandiosa de un Pantocrátor. 


El itinerario jacobeo sigue por el castillo -propiedad de la familia del compositor Cristobal Halfter-. Está rehabilitada solo una parte que sirve de vivienda. El resto está deteriorado.


El camino baja por la calle del Agua.


Está repleta de palacios y casonas. 



A la izquierda el Palacio barroco de los Torquemada. Y a la derecha la Casa Solariega de los Álvarez Osorio, de la misma época y estilo. 



A continuación encontramos la llamada casa morisca.


Por Rúa Nueva nos desviamos cien metros para visitar el Convento de la Anunciada.



El exterior no llama mucho la atención. Lo interesante está en el interior. En la capilla que está debajo del coro alto podemos admirar el panteón del Marqués de Villafranca - Pedro Toledo de Osorio- patrono del monasterio. 



A la izquierda del templo se venera la imagen del fundador San Lorenzo de Brindis. Y en el altar mayor luce un retablo barroco.


Lo más curioso es que en el patio se conserva un grandísimo ciprés del siglo XVII, que dicen es el más antiguo de España. 


Al norte de la calle del Agua subimos por setenta escalones  a la iglesia de San Francisco. Aunque la portada es románica el resto del templo franciscano se construyó en el siglo XV.


Un artesonado mudéjar cubre la única nave. 

A la derecha se construyeron dos capillas renacentistas. 



La calle del agua llega hasta la Colegiata de Santa María, en restauración actualmente por el exterior.
Se levantó en el siglo XVI en gótico tardío según proyecto de Gil de Hontañón. Su ejecución duró casi dos siglos. 




En su interior sobresale el coro barroco en madera de castaño del siglo XVIII y la capilla de la Trinidad.





El camino de Santiago cruza después los dos ríos. Primero el Burbia y luego el Valcarce. 




Seguimos hasta la salida de Villafranca, Disfrutamos de las vistas de Villafranca desde el oeste. 





Después paseamos por las sombras de la ribera. Llegó el mediodía, nos esperaban las truchas escabechadas del restaurante del casino en la plaza. 

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